Lo que más me ha impresionado de ese día es la habilidad que tuviste de captar nuestra esencia.
Si tuviera que describir el 5 de febrero en una sola palabra sería: mágico. Y se que esa magia se debe en su mayoría gracias a ti. A las horas de dedicación que le diste, a tu empeño, a tu talento y creatividad, a tu increíble atención a los detalles, a la prioridad que le das a la calidad de tus entregas, a tu liderazgo, y miles de cosas mas que pude evidenciar no solo el sábado sino estos meses trabajando juntas.
Lo que más me ha impresionado de ese día es la habilidad que tuviste de captar nuestra esencia. Yo personalmente lo sentí a lo largo del día, sentí que todo había sido preparado por una persona que quiso conocernos profundamente y que tuvo la intención de trabajar para evidenciarlo. El nivel de detalle con el que pudiste leernos como individuos pero también como pareja llegó a un punto que me abrumó (en el buen sentido) porque es lo que siempre quise y tu pudiste darlo. Eso sencillamente no tiene precio, porque demuestra que las bodas las llevas a un plano personal y no solo representan un acuerdo comercial para ti. También me impresiona que hayas logrado eso porque la cantidad de mensajes y comentarios que he recibido de los invitados diciendo: “la boda fue igualita a ustedes” te prometo es increíble. Ese fue el comentario más repetido y para mi eso no tiene precio, porque el día fue nuestro, fue un día para honrar nuestro amor, nuestra unión, y la bendición que representa este momento en nuestras vidas. Y todo gracias a ti.
Patricia Silva